
Últimamente estaba agobiado por tener que llevar siempre el móvil a todos los sitios; me sentía en la obligación de hacerlo (era un regalo de mi madre para que estuviera localizado, ya que no estoy mucho en un sitio fijo) y lo hacía. De mala gana pero lo hacía.
Me pesaba mucho, me ocupaba (no llevo nunca bolso ni nada, asi que tiene q ir al pantalón ;-) ). Y luego no lo usaba casi, porque no soy ni de recibir ni de enviar mensajes o llamadas.
Siempre he preferido las cosas cara a cara, no por teléfono, algo que odio. Y sobre todo no me gustaba el que haya llegado un punto en que con un simple mensaje se da por supuesto que lo has leido y tienes que actúar en consecuencia ... pues no, no hay que suponer que los mensajes se han leido ;-)
Y luego está el "quedamos de 8 a 8:30 y luego ya nos llamamos" ... esto va a cambiar, ahora quedamos a las 8 y el que se retrase (no suelo ser yo jeje) pues abucheo del público!!!
En fin, que el último recuerdo que tengo de mi móvil es que lo apagué de mala gana y lo metí en un bolsillo en la mochila (en Nueva Zelanda), nunca se en que bolsillo lo metí ... y no ha aparecido. Llevo más de una semana sin móvil y estoy feliz, alguna bronca tengo cuando alguien me lo pone de excusa, pero feliz.
La única pena son los mensajes que guardaba, les tenia cariño y me gustaba leerlos de vez en cuando. Y también he perdido teléfonos de gente que si bien ya no tenia contacto, quien sabe si en un futuro lo pudiera haber tenido...pero compensa.
P.S.: Y de paso estoy viendo quien demuestra interés y está por encima de no tener móvil y quien no.